Su mejor amiga y compañera se concentró mucho para pedir el deseo. Era muy sencillo, Lisecla quería volar. Y, ¡Tachán! de pronto la niña empezó a elevarse. ¡Qué buena la sensación de no pesar!.
Como siempre en el Mundo Calabaza los deseos son dobles, esta vez, y tratándose de Lisecla, no podía ser menos. Seta le acababa de dar la posibilidad de mirar las cosas desde otra perspectiva, desde afuera.
Por lo pronto, en su primer viaje, casi hasta el espacio, ya había podido descubrir que...
Felicidades Angélica. Les he enviado el enlace de este blog a mis sobrinas. Estoy segura que les va a gustar tanto como a mí. Mil besitos guapetona.
ResponderEliminarGracias guapa!! Me lo llevo a un encuentro con editores en julio, a ver si sale algo ;).
ResponderEliminarMilxmil besotes!!
Hola, he llegado a este bloc gracias al washap. Me han parecido unas ilustraciones preciosas, me han encantado. Y, parafraseando la canción de Toy Story: "...hay una artista en ti ...". Besos
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